Cuando estamos desarrollando producto, tenemos que hacer frente a múltiples desafíos y uno de los más complejos es el de estimar cuánto tardaremos en tener lista una entrega o incremento de producto.
¿Para qué estimamos?
Para saber con cuantas tareas se puede comprometer un equipo durante un sprint.
¿Cómo podemos estimar?
Si pensamos en puntos de historia, tenemos que pensar en la dificultad, pero cuando nos ponemos a estimar empezamos a pensar en horas y eso es un problema.
¿Todos tardan lo mismo en hacer una misma tarea?
La respuesta es NO, si tenemos juniors y seniors en el equipo, no van a tardar lo mismo en hacer una misma tarea. El senior con más capacidad, acabará haciendo más puntos de historia que el junior, pero lo que importa es el rendimiento en conjunto del equipo.
Cuando los juniors vayan reduciendo el tiempo que tardan en realizar las tareas la capacidad productiva del equipo aumentará.
¿En qué nos basamos para poder poner los puntos de historia?
Para poner puntos de historia nos basamos en el “Pivote”.
¿Qué es el pivote?
Es es un item del backlog en el que todos los miembros del equipo se ponen de acuerdo en su dificultad y se da un peso, con este pivote definido se procede a comparar con otras tareas y determinando si es mayor, menor o igual que el pivote podemos puntuar.
¿Cómo conseguimos una buena estimación?
Dentro de un sprint puede haber tareas más complejas que otras, haciendo la suma de puntos de historia podemos calcular a qué volumen de tareas puede hacer frente un equipo.
Conclusión
Cuando el equipo lleve unos tres sprints podremos ver cual es la media de puntos de historia puede alcanzar por sprint, esto nos permitirá ajustar con más precisión las tareas que conformarán los siguientes sprints.